OBESIDAD, DIABETES E HIPERTENSION: REGALOS DEL DIA DEL NIÑO

Joaquín Moreno / Columnista La Región

Este 30 de abril, celebramos el día del niño en México. Todos lo sabemos y hasta lo esperamos porque eso significa fiesta, regalos y piñatas.

Pero en  nuestra generación de adultos, en México, orgullosa de portar el distintivo de Primer lugar mundial en obesidad, no hemos sido capaces de frenar esa maldita herencia a nuestros hijos obesos, quienes por supuesto, al amparo de nuestros consejos ya tienen el estandarte del segundo lugar en obesidad infantil a nivel mundial.

Por acuerdo de la Organización de las Naciones Unidas, en México, en el periodo del presidente Álvaro Obregón, se empezó a celebrar el día del niño en esta fecha y desde entonces era y es esperada por millones de niños en este país.

Que es lo ha pasado? Porque nuestros hijos ahora son gordos, diabéticos e hipertensos? En gran parte, los dos grandes rubros de la salud y la educación son descuidados por los gobiernos estatales. La pobre información que reciben los adultos acerca de la alimentación sana y el ocultamiento de la información que hacen quienes producen los refrescos y la llamada comida chatarra, son en gran parte responsables de este negro panorama de nuestra niñez.

Si a esto le sumamos que ahora nuestros niños prefieren los juegos donde la tecnología impera y preferentemente juegan sentados y en algunos casos hasta acostados. El ejercicio, el deporte y los juegos de patio y de jardín nos hacían gastar energías y la caminata que antes hacíamos para ir a la escuela, también nos hacia obligadamente hacer ejercicio. Hoy la inseguridad nos obliga a esperar un transporte y la facilidad de comprar comida chatarra, botanas y refrescos, nos propicia la gordura, la cual no necesariamente nos indica que nuestros hijos sean sanos.

La Secretaria de Salud, en México, tiene una estadística de 70 mil muertos por diabetes en el año 2013. Lamentablemente esta tendencia crecerá y en los próximos años veremos a quienes hoy son niños, con problemas de obesidad, ceguera, hipertensión, amputación de extremidades y todo lo que desencadena esta pésima alimentación que damos a nuestros hijos.

Los gobiernos nos informan que están haciendo políticas publicas que bajen los índices de morbilidad de estas enfermedades crónico degenerativas, sin embargo, todos sabemos que en la realidad solo son discursos huecos que no se reflejan en el beneficio de la población, porque de ello hablan las estadísticas.

Cual sera la postura del Gobierno de Gabino Cué ante estas contundentes cifras de desnutrición? Cual es la postura de nosotros como padres de familia hacia nuestros hijos? La respuesta es del gobierno y sus políticas de salud publica y por supuesto de nosotros, los padres de familia en cuanto al futuro que construimos cada día para ellos.
 

Feliz día del niño.

Como siempre a sus ordenes en joaquinmorenon@hotmail.com