¿Por qué no se conoce el móvil de multihomicidio en la Narvarte?

CIUDAD DE MÉXICO.- A pesar evidencias, indicios, testimonios y trabajos periciales, la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) no ha podido establecer el móvil del crimen en el que perdieron la vida el fotoperiodista Rubén Espinosa, la activista Nadia Vera, la colombiana Mile Virginia Martín, y las mexicanas Alejandra Negrete y Yesenia Quiroz en la colonia Narvarte.
El titular de la procuraduría capitalina, Rodolfo Ríos Garza, señaló que se agotarían todas las líneas de investigación para esclarecer el asesinato de las cinco personas, sin embargo, desde el principio se inclinó por el móvil del “robo”, el cual robusteció a lo largo de cinco días con la revelación de los algunos datos de la averiguación previa.
En las presentaciones de avances de la investigación se exhibieron las contradicciones y la lentitud con que la que actuó la PGJDF en el caso, lo que va en detrimento del acceso de los familiares a la justicia y la verdad.

MÓVIL: ROBO

La noche del 31 de julio de 2015 se conoció del hallazgo de cinco cuerpos en un departamento del edificio ubicado en la calle Luz Saviñón, en la colonia Narvarte, de la Delegación Benito Juárez. Al día siguiente la procuraduría capitalina emitió un escueto comunicado de prensa para dar cuenta que la Fiscalía Central de Investigación para la Atención del Delito de Homicidio atraería el caso.
Al difundirse que entre las víctimas se encontraba el fotoperiodista, Rubén Espinosa, las autoridades convocaron a una conferencia de prensa, que terminó en la lectura de un mensaje con detalles premilitares de la investigación.

Ríos Garza, el domingo 1 de agosto, dijo que “a partir del análisis de los hechos y las constancias recabadas en el lugar, hasta el momento se puede desprender la comisión de los delitos de homicidio, robo y demás resultantes, sin excluir ninguna de las líneas de investigación abiertas para esclarecer los hechos”.
Omitió revelar los nombre de las cuatro víctimas femeninas “en cumplimiento al Protocolo de Investigación ministerial, policial y pericial con perspectiva de género para el delito de feminicidio”, sin embargo, desconocía la identidad de la mujer colombiana y a que se dedicaba.
A partir de ese momento, la procuraduría comenzó a entregar información a cuenta gotas y mostrar su lentitud.


El lunes 3 de agosto, el diario La Razón publicó extractos expediente FBJ/BJ-1/T2/4379/15-07 en el que decía que los homicidas eran conocidos de sus víctimas, que incluso convivieron de la noche del jueves hasta la mañana del viernes, que se robaron carteras, alhajas y el automóvil Mustang 2006, color rojo con franjas blancas en el toldo y el cofre, con placas 486VRN, que presuntamente pertenecía a Nicole, la víctima de origen colombiano. Un elemento que sumaba a la línea de investigación del robo.

Por la tarde de ese día, las autoridades capitalinas encontraron el vehículo en calles de Paseos de Tasqueña, en la delegación Coyoacán, tardaron más de 60 horas en localizar el automotor a pesar de que una cámara de video vigilancia del Programa Ciudad Segura está instalada casi frente al número 1909 de Luz Saviñón, el monitoreo y el seguimiento de esa cámara retraso en dos días la aportación de indicios a la investigación.
La PGJDF reconoció que durante “una nueva inspección ocular en el departamento”, agentes del Ministerio Público encontraron el tarjetón de circulación correspondiente a dicho vehículo, lo que revela que los peritajes en el inmueble no fuero exhaustivos.

Además, dejó pasar más de 24 horas para solicitar al Consulado de Colombia en México información sobre la posible identidad de “Nicole” y a la Fiscalía General del Estado de Veracruz la denuncia o querella presentada por Rubén Espinosa.
El martes 4 de agosto, se difundió el video, con imágenes del sistema de viodevigilancia del gobierno de la Ciudad de México, donde se observa que tres sujetos salen del edificio, que llevaban arrastrando una maleta voluminosa con ruedas y cargaban otra pequeña, que uno escapó en el Mustang rojo.
La investigación del robo se reforzaba con el presunto saqueo de las pertenencias de las víctimas, algunas joyas y pertenencias que sacaron de la habitación de Nicole y de la Yesenia –otra víctima-.

“Se puede observar que lleva una maleta negra que tiene cierto peso en donde pudiera haber unos objetos que se encontraban en este departamento”, dijo el procurador Rodolfo Ríos Garza en conferencia de prensa.

Dijo que no hubo fiesta ni reunión alguna en el departamento del edificio de Luz Saviñón donde fueron asesinadas las cinco personas, que alrededor de las 2:00 horas del viernes, el fotorreportero, un amigo de este y la joven Nadia Vera –promotora cultural arribaron al departamento 401 procedentes de un bar. Lo cual corregía la versión del expediente FBJ/BJ-1/T2/4379/15-07 sobre la supuesta convivencia de los homicidas con las víctimas.
Un mensaje de Rubén Espinosa con un amigo a través de Whatsapp y la hora de salida de los presunto autores materiales del multihomicidio demostraron que privaron de la vida a las cinco personas entre las 14:00 y las 15:00 horas, es decir, que no existió convivencia ni fiesta como se adelantó al principio de la investigación.
Y fue Consulado de Colombia en México quien confirmó tres días después la nacionalidad de la víctima e informó que el nombre de su compatriota no era Nicole, sino Milé Virginia Martín.

El 5 de agosto se presentó ante el Ministerio Público a Daniel Pacheco, quien habría confesado su participación en los hecho de la colonia Narvarte, sin embargo, dos días después se reservó el derecho a declarar ante un juez y solicitó la ampliación del plazo para hacerlo.

MÓVIL: ATAQUE EN CONTRA DE LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN

El domingo 2 de agosto, Ríos Garza señaló en conferencia de presa que familiares Rubén Espinosa “refirieron que su regreso a la capital del país fue hace dos meses, se debió a la búsqueda de nuevas oportunidades como fotógrafo profesional”.
El fotoperiodista Rubén Espinosa salió de Veracruz el 9 de julio tras las presuntas amenazas y hostigamiento de las autoridades del gobierno de Veracruz. Concedió entrevista a algunos medios para denunciarlo y anunciar que se autoexiliaba en el Distrito Federal. Meses atrás, Nadia Vera, también denunció la persecución y abandonó la entidad veracruzana.

Sin embargo, el procurador capitalino aseguró que su regreso fue en busca de un nuevo empleo, sin embargo, se activaría el protocolo de investigación para la Atención de Delitos Cometidos en Agravio de las y los Periodistas en el Ejercicio de esta Activad.
Un día después, el 3 de agosto, la PGJDF recibió de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión de la Procuraduría General de la República (PGR), una copia certificada de la averiguación previa iniciada por los hechos que Rubén Espinosa denunció en septiembre de 2013, ocurridos en Veracruz.

La prueba de que si existía un antecedente de acoso hacía el fotoperiodista.
Al respecto, Luis Ángel Bravo, titular de la Fiscalía General del Estado de Veracruz, dijo a través de su cuenta de Twitter que ni Rubén Espinosa ni Nadia Vera reportaron a las autoridades el hostigamiento que habían denunciado a través de organizaciones sociales e internet.

Con la averiguación previa aportada por la PGR, la procuraduría tenía elementos para iniciar seguir la línea de investigación sobre un ataque a la libertad de expresión, pero no lo hizo.
Aunque Rodolfo Ríos Garza afirmó que no se descartaría actividad periodística de Rubén Espinosa como móvil del crimen, fuentes de la dependencia aseguraron que ni siquiera han solicitado información sobre el trabajo profesional en la revista Proceso, que evidencia que no se ha abundado en esa línea de investigación.

MÓVIL: VENGANZA

Una venganza contra Milé, la mujer colombiana, es la línea de investigación más fuerte que tiene la procuraduría capitalina, por la manera en que la mataron y abusaron sexualmente de ella. Se presume que pudo ser el blanco del crimen, además, los homicidas serían conocidos de ella.
Este móvil se creció porque en la indagatoria dos testimonios habrían reconocido en los retratos hablados de la PGJDF a los tres sujetos como amigos de Milé, quienes participaron en la reunión del 30 y 31 de julio.

De acuerdo con la averiguación previa FBJ/BJ-1/T2/4379/15-07, un amigo del fotógrafo Rubén Espinosa, que estuvo con él y con Nadia Vera en el departamento, proporcionó detalles de entre tres y cuatro de las personas que convivieron por última vez con las víctimas, para elaborar sus retratos hablados.
Sin embargo, otra compañera de departamento de las víctimas, la otra testigo, aseguró que se percató de la llegada a las 2:00 horas del viernes de Nadia, Rubén y un amigo de ellos, y de que no hubo reunión en el departamento esa madrugada.
Ella afirmó que los presuntos homicidas no convivieron con ellos, razón por la que no pudo dar su media filiación.
Declaraciones que revelan que uno de los dos testigos falseó su declaración, o que la procuraduría capitalina habría construido el testimonio que derivó en los retratos hablados, incluso dichas imágenes no han sido presentadas.

El procurador Ríos Garza y los peritos capitalinos no han podido establecer la hora de llegada de los tres presuntos homicidas al edificio de la calle Luz Saviñón, y sólo porque Milé presenta las lesiones y abusos más fuertes entre víctimas se buscarían establecer que ella fue el móvil de multihomicidio. (La Silla Rota)

Con la tecnología de Blogger.